lunes, 25 de noviembre de 2024

20 Años De... U2: How To Dismantle An Atomic Bomb (2004)

 "Caricatura de sí mismos..."

La historia es conocida. El "fracaso" (las comillas son totalmente intencionadas) de Pop (1997) volvía a sumir a U2 en una crisis existencial similar a la que habían vivido diez años atrás post Rattle & hum (1989). Con una diferencia relevante eso si: la crisis de 1990 era artística, más no comercial. A los noventa los irlandeses entraban con dudas en torno a su perfil artístico, preguntándose si aún tenían algo relevante que decir y por lo que existir, de ahí que la respuesta fuese artística: el brillante Achtung baby (1991). Entrando a los dos miles, sin embargo, lo que embargó a U2 fue un terror a volverse irrelevantes, viejos y que bandas como Coldplay (entre otros) les ganasen la partida llenando estadios. De ahí la decisión de abandonar por completo la vanguardia noventera simplificando fórmulas para así congraciarse con el público mediante un meloso All that you can't leave behind (2000), un álbum sencillo, ameno y que en términos de promoción (+ gira) explotaba el perfil mesiánico de un Bono que desde entonces decidió transformarse en una caricatura de si mismo. 

Quedaba en el aire, sin embargo, la duda respecto al siguiente paso. ¿Más de lo mismo o algún tipo de paso hacia adelante? Lo cierto es que How to dismantle an atomic bomb (qué título más molesto, por favor...), a diferencia de su antecesor que era bastante más claro y conciso, pretende ser muchas cosas (de ahí la cantidad de productores que metieron mano acá, ocho en total). Un disco que intenta retomar la veta más rockera de U2 y entregarle protagonismo a la guitarra de The Edge en canciones como 'Vertigo' (que sería a los irlandeses lo que 'It's my life' fue a Bon Jovi, es decir el último hit en su carrera y la canción que quizás salvo de la quema a este álbum), una interesante 'Love and peace or else', donde se acuerdan de lo que era construir una atmósfera gracias al tándem Adam Clayton + Larry Mullen Jr. que acá funciona perfecto, aunque al mismo tiempo lastran el resultado a causa de esa producción que tiende a endulzar el sonido con campanitas y similares, o ese esperpento que es 'All because of you', con un coro amateur a más no poder y una de las peores canciones de U2 en su historia. Porque claro, una cosa es querer sonar afilados y otra efectivamente poder. Lo cierto es que a quien tenemos acá en guitarra parece ser una especie de imitador barato de The Edge por lo que los riffs acaban siempre siendo bastante simples y es realmente poco lo que aquí suena a esos U2 que diez o quince años atrás podían reventarte la cabeza asumiendo riesgos en cosas como 'In god's country', 'Acrobat' o 'Gone'.

Por lo mismo, cuando más cómoda se siente a la banda es cuando entrega una versión azucarada del mítico The Joshua Tree (1987), es decir, en la adorable 'City of blinding lights' (aquí si que están en modo Coldplay armando una especie de 'Clocks' que pretende ser más ambiciosa aunque de nuevo, no les da), la seria 'One step closer' (un digno ntento por recuperar las atmósferas de The unforgettable fire) o las hiper melosas 'Original of the species', 'Crumbs from your table' (auto plagio del single 'Electrical storm') o 'Yahweh' (otro "quiero pero no puedo"), asunto que complementarán con algunas baladas como 'A man and a woman', que en su simpleza me sigue pareciendo de lo más agradable del disco, el auto plagio (y ya van...) que es 'Miracle drug' (donde nos intentan ver la cara imitando a 'Beautiful day' con descaro, de hecho, es raro que no haya sido single promocional) o 'Sometimes you can't make it on your own', con dedicatoria personal y emocional al padre de Bono en otro de los buenos momentos del disco. 

How to dismantle an atomic bomb en ningún caso es un mal disco sino más bien uno que sostiene esa versión endulzada de U2, donde la banda pareciese siempre imitarse a si misma, aunque a diferencia de lo que hicieron en los noventa, esta vez sin ninguna gracia ni ironía de por medio.

Nobleza obliga decir que más allá de los resultados musicales, a la banda mal no les fue en cuanto a objetivos. En su simpleza el disco efectivamente supo llegar a nuevos públicos y ampliar su target, que era lo que buscaban. Y es que claro, para alguien que no conocía canciones como 'One tree hill' o 'Where the streets have no names' seguro 'Original of the species' o 'City of blinding lights' le resultaron alucinantes. Por supuesto que quienes les conocíamos vimos el plumero a distancia y mucha sorpresa no encontramos en esta lista de canciones, sin embargo, su meta no éramos nosotros, ellos deseaban nuevas (¡y jóvenes!) audiencias para agigantar su legado. Desde ahí entonces la jugada funcionó. ¿Qué el disco es una completa mediocridad? Da un poco igual. Porque cuando los objetivos son comerciales y no artísticos, ocurre esto. Así suele ser es el pop: coloca los resultados por sobre los medios. 

¿Canciones? 'Vertigo', 'Sometimes you can't make it on your own' y 'A man and a woman'.

No hay comentarios:

Publicar un comentario