domingo, 3 de diciembre de 2017

20 Años De... U2: Pop (1997)

"Caótico, confuso y valiente..."

La mutación vivida por los irlandeses de U2 a comienzos de los años 90 debe estar entre las más exitosas e impresionantes en la historia de la música. El paso desde la dupla The Joshua Tree/ Rattle & Hum a Achtung Baby/Zooropa da muestras de una agrupación que, cual Zenedine Zidane, en un momento complicado y clave del partido, agarró el centro de volea y logró meterla en el ángulo. Con esta jugada los irlandeses se despeinaban estéticamente (Bono dejaba de ser el personaje político mesiánico para meterse en cueros y disfrazarse de una especie de arrogante Elvis moderno) mientras en lo musical lograban conjugar vanguardia, modernidad y masividad. Sin embargo, y para sorpresa de todos, por ahí por 1995, la banda se siente tan pero tan genial que, en la cresta de la ola, decide hacer una pirueta suicida, la cual desembocaría un un álbum titulado simplemente: Pop

El contexto es el siguiente. La maratónica gira Zoo TV, que promocionaba los álbumes Achtung Baby + Zooropa, había terminado por lo que se toman entonces un (merecido) descanso para repescar ideas. En esa búsqueda es que deciden desarrollar un proyecto paralelo alternativo junto a Brian Eno titulado Passengers (desde donde emerge la fabulosa colaboración 'Miss Sarajevo' junto a Luciano Pavarotti) y regalan la fantástica 'Hold me, thrill me, kiss me, kill me' para la banda sonora de la película que fue Batman Forever. Llega 1996, van tres años desde Zooropa, el plato aún sigue caliente y el sello presiona, por lo que se meten al estudio. Hay un pequeño problema eso si: las canciones no están. Hay ideas, maquetas, discusiones respecto a que dirección tomar, pero el grueso de las canciones no está, lo cual los lleva a posponer el lanzamiento y comenzar a decidir a contratiempo. El plazo fatal para el lanzamiento sería marzo de 1997, ya que la gira está contratada (¡error fatal!) y esta debía partir en abril de dicho año, lo cual los obligaba a tener el single promocional en Diciembre y el disco terminado en Enero, estuviese como estuviese. Colocan entonces la carreta antes que los bueyes, por lo que el resultado no podía ser otro: un álbum confuso, que proyecta algo que no es y contiene muchas canciones que evidentemente no están terminadas (de hecho, las finalizan en vivo, en medida que avanza la gira). En palabras del mismo The Edge: "en el estudio queríamos expresar todo aquello que estábamos conociendo en la vida nocturna, y si hubiésemos sido Prince creo habría sido más fácil, pero no somos Prince..."

¿Y qué pretendía U2 proyectar con Pop? Una especie de crítica inteligente respecto a la cultura de consumo. Querían ser un enemigo interno del mercado. El álbum fue, de hecho, promocionado meses previo a su salida por 'Discotheque', cuyas líneas insinuaban estas intenciones ("Tu sabes, estás masticando chicle / Tu sabes lo que es pero quieres algo más...") enmarcadas además en un sonido que buscaba ser tan divertido como sofisticado. Sin embargo, el chiste no se entendió. 

¿Qué proyectó en lo concreto Pop? La idea de que la banda se había aligerado al abandonar el rock, abrazar la música nocturna y la electrónica de manera forzada, además de encarnar una incoherencia musical enorme: el disco pretende avanzar hacia muchos lugares, demasiados diría yo...

Dicho por Bono en su visita a Sarajevo en 1997: "promocionamos Pop como el álbum más alegre de nuestra carrera, siendo que probablemente es el más triste de todos". Y esa es una gran verdad. El disco abre con tres potentes temas que se lanzan a la electrónica de lleno, 'Discotheque' + 'Do you feel loved' + 'Mofo', las cuales cuentan con capas y capas de sonidos, mezcladas todas por los productores del álbum, Howie B y Flood, sin embargo, baja a terreno bruscamente con dos baladas: 'If god will send his angels' (que es una crítica al mercadeo religioso) y 'Staring at the sun', una gran canción de amor inmersa en un contexto bélico ("Intransigencia a nuestro alrededor / Los militares aún están en la ciudad..."). Posteriormente aparece el rock, primero en 'Last night on earth', uno de los temas que sufrió la inclemencia de haber sido incluido casi como una maqueta en el disco, la extraordinaria 'Gone', profunda reflexión personal de Bono respecto a la fama ("Querías llegar a ese lugar tan rápido / Que tuviste que perderte durante el camino...") y probablemente una de las mejores canciones de U2, no solo de esa década, sino que de su carrera entera, y la mixtura electrónica/guitarras que es 'Miami' (otra que evidentemente entra en el disco sin estar acabada) que en algún momento se barajó como nombre del álbum. 

Entrando en la recta final Pop se adentrará sobre ambientes muy oscuros de los que no volverá a salir, sonará la irónica y astuta 'The playboy mansion' ("Si la coca es un misterio / Michael Jackson, historia / Si la belleza es verdad y la cirugía fuente de juventud...") , la increíblemente elegante 'If you wear that velvet dress' (que venía de las sesiones de Zooropa), luego 'Please' (la única que retoma con fuerza el carácter político de la banda) y el cierre con otra reflexión espiritual notable por parte de Bono en 'Wake up dead man' El disco cierra por tanto en un lugar completa y absolutamente diferente a donde comenzó, lo cual habla claramente de que la banda no logró ensamblar con coherencia en estas doce canciones, probablemente por un exceso de ambiciones, una sobre estimación de sus capacidades y también lo apurados que debieron trabajar al haber firmado contratos con un disco en pleno proceso de gestación. En definitiva la banda acabó siendo devorada por su propia sombra. 

En materia de direcciones por tanto Pop resulta un ejercicio algo caótico, sin embargo, mirando el vaso medio lleno, acá hay excelentes canciones (algunas derechamente brillantes) y en lo suyo la mayoría de estas funcionan, además de dar muestras de una dupla Bono/The Edge aún en éxtasis creativo, tanto en materia lírica como en cuanto al tratamiento de las guitarras (lo que Edge logra en 'Mofo' o 'Gone' es un asunto de otro planeta). Pop representa además el último gran salto al vacío que U2 dio en su carrera. En 1997 una facción de los irlandeses, esa valiente y arriesgada, dejaba de existir, dando paso a una agrupación mucho más temerosa, cuidadosa de cada paso a dar y que desde 2000 en adelante se sumergiría en terrenos realmente comerciales y seguros (porque Pop fue cualquier cosa, menos un disco comercial). Pero aquello será motivo de una futura reseña de aniversario, la de All that you can't leave behind, que en 2020 cumplirá dos décadas de existencia...

7,5/10
¡Muy bueno!


Otras reseñas de U2:

No hay comentarios:

Publicar un comentario