Pearl Jam es una banda que jamás me ha entregado un mal disco. Afirmo esto dejando el fanatismo afuera (aunque no lo parezca). Tendrán sus altos (Ten, Vs, Yield, Pearl Jam) y sus no tan altos ( Rioc Act, Backspacer), sus experimentos acertados (No code) y otros no tanto (Binaural) , pero en el global me parece que la agrupación no solo ha logrado sobrevivir a la (siempre complicada) madurez si no que también ha sabido conservar elementos de frescura en su música pese al paso de los años. Sin embargo, soy muy consciente de que nada es eterno en esta vida y Backspacer (2009), su anterior entrega, pese a de todas maneras ser un álbum que se encontraba sobre la media, daba ciertas señales de agotamiento por lo que en la previa a este trabajo temí el llegar a encontrarme con un disco cargado de auto complacencia y de cierto estancamiento creativo. Finalmente no ha sido así, Lightning bolt, el décimo álbum de Pearl Jam, pese a que no da para lanzar cohetes de alegría (Pearl Jam y Backspacer me dejaron mejores sensaciones en un inicio) y sin descubrir la rueda (ya no hace falta por cierto), continua pasando la prueba de la blancura tanto en lo individual como en lo colectivo.
¿Qué le podemos pedir a un disco de Pearl Jam a estas alturas? En realidad creo que la pregunta es a la inversa ... ¿Qué no queremos oír en un disco de Pearl Jam? En lo personal no deseo verlos faltos de hambre, podrán acertar o no pero quiero verlos siempre mirando con osadía el presente, no quiero verlos existir solo por cumplir. Y bueno, mirándolo desde aquella perspectiva se percibe en Lightning bolt a una banda que sigue mostrando ansias por dar pasos hacia adelante y lucha por encontrar canciones notables pero en esta ocasión el resultado carga con muchos altos y bajos por lo que el producto final es tremendamente irregular.
Pero pasemos a las canciones, lo realmente importante acá. La partida de Lightning bolt se mueve dentro de lo que ultimamente Pearl Jam nos viene entregando, es decir, tres temas de garage y que apuntan directo a la médula del rockero. "Getaway" , "Mind your manners" y "My father's son" son directas y no dan tregua. Las dos primeras están muy bien pero en lo personal "My father's son" (la "Comatose" de este álbum) me ha parecido el primer real momentazo que vive este disco, encontrando en estos tres minutos a una banda inspiradísima y a un Eddie Vedder que se entrega por demostrar el que aún puede interpretar temas de manera soberbia. Más adelante en el disco sonará "Lightning bolt" (la canción) , otra muy potente y ágil que funcionará en una linea similar a las inicialmente mencionadas, sin embargo, entre ellas aparecerá "Sirens", una hermosa balada que logra el equilibrio gracias a una sensibilidad muy bien lograda de la mano de guitarras y teclados que funcionan muy bien y en donde nuevamente Vedder alcanza altas cotas interpretativas. Desde ya se aprecia que el vocalista será, para bien y para mal, actor principal de este trabajo.
Las primeras cinco del álbum son un verdadero viaje sin desperdicio, sin embargo, a partir de acá comenzarán los altibajos del álbum, probablemente el gran punto débil con que cuenta Lightning bolt: el no lograr sostener durante toda su duración el mismo nivel. "Infalible", por ejemplo, es un tema demasiado inofensivo en relación a lo que venía sonando y algo similar ocurre con "Swallowed whole", otro medio tiempo que tiende a caer en la intrascendencia. Mucho más arriesgada suena "Pendulum", básicamente gracias a los oscuros e íntimos ambientes que encuentra, los cuales lamentablemente no se conectan con nada que funcione en la misma linea. De igual manera "Let the records play" juega mucho con guitarras cargadas de rock and roll , el problema es que el tema es tímido y se queda solo en la insinuación de algo que jamás llega.
La recta final del álbum es casi un disco en solitario de Eddie Vedder. De hecho comienza con "Sleeeping by myself", un tema que ya conocíamos de la edición del Ukelele songs (2011) y que realmente no se que pinta acá ya que no aporta demasiado en relación a la versión original. "Yellow moon" y "Future days" mejoran bastante el asunto entregando un grato final cargado de nostalgia pero que siento no se encuentra a la altura de otros cierres que le habíamos conocido a la banda ("All or none" , "Inside job" o "The end", sin ir demasiado lejos). Sin que sea un mal final siento que faltó la intensidad que en otras ocasiones sobró, creo que desde Binaural (2000) no me encontraba con un cierre de disco tan frío como este.
Lightning bolt es un disco agradable en el global y que seguramente no dejará disconforme a los fans, de las doce canciones que lo componen al menos siete son de alto nivel, el problema es que la mayoría de ellas están concentradas en la primera parte del disco, de hecho solo "Pendulum" y "Yellow moon" me parecen realmente destacables dentro de los últimos 25 minutos de álbum y aquello creo que termina dejándote sensaciones encontradas. Es un buen álbum pero dentro de la discografía de Pearl Jam se mueve entre lo "menos bueno" junto a Binaural y Rioc Act.
6 / 10
Bueno, cumple.
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