sábado, 25 de marzo de 2017

20 Años De... Aerosmith : Nine Lives (1997)


Tiene mérito el que una banda adulta logre congeniar con generaciones menores, claro que lo tiene, y Aerosmith durante un largo tiempo dictó cátedra al respecto. Ahora, el golpe lo dieron en 1993 cuando tras veinte años de carrera lograron instalar una serie de hits efectivos en el cerebro de los adolescentes de aquel entonces. Fue así como 'Crazy', 'Cryin'' y 'Amazing' se transformaron mágicamente en himnos de un momento a otro y posicionaron a Aerosmith nuevamente en el ojo del huracán. Sin embargo, tras dos décadas de trabajo la inspiración no fluye como quien respira por lo que la banda tuvo que tomarse cuatro años para editar su siguiente álbum, aunque claro, la espera valió absolutamente la pena...

En materia musical Nine lives da continuidad a los aspectos melódicos que la banda trabajó en Get a grip pero cuenta con un matiz importante: incorpora (o recupera más bien) la rudeza extraviada durante los últimos años. Nos encontramos así frente a un álbum balanceado (a diferencia del mencionado, acá prácticamente no hay baches, relleno ni puntos bajos), que se mece entre temas que dan cuenta de un hard rock veloz y otros muy melosos pero que funcionan de manera maravillosa en el contexto del álbum. 

El disco abre mostrando de inmediato tres aristas marcadamente diferentes. Mientras 'Nine lives' (la canción) es velocidad y desenfreno, 'Falling in love' (tema escogido para promocionar el disco) trae de regreso el rock melódico y contagioso (a veinte años de su aparición me sigue pareciendo un single fabuloso) y 'Hole in my soul' es un baladón que apunta directo a llenar el hueco dejado en el pasado por temas como 'What it takes' o 'Amazing'. En adelante el disco seguirá moviéndose como pez en el agua por estas mismas estaciones, 'Full circle', la absolutamente perfecta 'Ain't that bitch' o la sencilla pero efectiva 'Pink' representarán la veta más melódica del disco mientras que 'Something's gotta give' o 'Crash' darán rienda suelta a las guitarras y la dinámica explosiva. Dentro de los experimentos destacan los aires orientales de 'Taste of India' o la densa 'The farm', mientras que el único "pero" que podríamos cargarle al álbum es que el cierre, a cargo de 'Fallen angels' es algo frío y falto de garra. Eso en todo caso buscándole la quinta pata a un gato siendo que en estricto rigor no habría necesidad...

Sabemos que el éxito es una puta ingrata por lo que no sorprende en absoluto el que un álbum como Nine lives no fuese capaz de superar a su antecesor en términos de "suceso" pese a contar con méritos de sobra e incluso ser un mucho mejor disco. Rara vez coincide el fenómeno comercial con la calidad, eso es sabido, aunque también es igual de cierto que a los enfermitos de la música aquello nos trae sin cuidado. Con o sin la repercusión merecida y a veinte años de su edición, Nine lives sigue sonando como un álbum efectivo, diverso y dinámico, eso sin mencionar el que fue además (y esto hay que decirlo) el último gran disco en la carrera de Aerosmith. En 2001 llegaría a nosotros Just push play, que sin ser un mal disco si acabó representando el comienzo del fin creativo para la banda, pero bueno, aquello será materia a tratar en el futuro, si es que la vida me sigue acompañando en 2021.

Por cierto, y con esto cierro: ¿llegará el día en que reconozcamos que Steven Tyler es uno de los más grandes vocalistas en la historia del rock? 

4.0 // Excelente!

Otras reseñas de Aerosmith:
1993 // Get a grip

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