"Prueba notablemente superada..."
Si una incertidumbre se sembró durante las dos décadas en que existió Oasis, fue si Noel Gallagher podría desarrollar una carrera fuera de su banda madre. Su calidad compositiva se mantuvo siempre intacta, incluso en aquel Dig out your soul (2009) pudimos encontrar canciones notables, sin embargo, la voz, actitud y carisma sabíamos estaban con Liam, por lo que quedaba por ver si el mayor de los hermanos podría sobrevivir al desafío. Finalmente su debut a cargo de los High flying birds vive entre nosotros y el resultado no podría ser más alentador pues lejos de publicar un álbum compuesto con sobras o "a la rápida", nos encontramos ante diez canciones de alto nivel, que se enmarcan en el sonido tradicional que Noel venía desarrollando en Oasis (digamos, baladas estilo 'The masterplan' o medios tiempos tipo 'The importance of being idle') pero sin nada que envidiar a dichas composiciones.
Pues lo dicho, que el álbum es un paseo, un viaje que muestra al compositor en plena libertad, asunto que lejos de molestar termina por agradecerse. Nos encontramos con un disco que en el grueso podría considerarse sencillo, un disco que no cuesta oír ni disfrutar, que a simple vista pareciese no pretender demasiado, en donde Noel hace gala de su condición de gran creador de melodías. Abrirá eso si de manera tremendamente osada con la increíble 'Everybody's on the run', que con sus ambiciosas orquestaciones plantea un escenario colosal dispuesto a devorarse al mundo (canción que por cierto tendrá un posterior auto plagio posterior en '(I wanna live a dream in my) record machine' que es muy similar melódicamente). Más adelante, otra que escapará de lo obvio será 'Aka... what a life!', juguetona en su dinámica y expresiva en su interpretación llega para correr un tanto los límites del propio Noel, lo cual se agradece y valora.
El resto se moverá donde se espera, se sucederán canciones algo más tradicionales aunque todas muy cuidadas, la pasada por ´Dream on", "The death of you and me" o 'Soldier boys and Jesus freaks' engancha y convence gracias a los notables estrofa/puente/coro que propone, aunque será la preciosa e intensa 'If I had a gun' la que se robe los papeles. Digámoslo, es una canción que en otra época habría sido un clásico eterno pero a la que lamentablemente le perjudica el llegar a nosotros en 2011.
Para cerrar, un tema de Oasis como 'Stop the clocks' revisitado por el compositor (que son sus temas, el tipo puede hacer lo que le de la gana), finalizando un trabajo consistente y que instala desde ya altas expectativas respecto al futuro del vocalista. Desafío superado claramente el de Noel con su debut, muchas de estas canciones yo querría oírlas en uno de sus conciertos, lo cual considerando el catálogo del guitarrista suena a bastante.
¿Canciones? 'Everybody's on the run', 'Dream on', 'If I had a gun', 'AKA... What a life'.
7,8 /10
Excelente.
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