domingo, 22 de mayo de 2016

Radiohead: A Moon Shaped Pool (2016)

Todo en su lugar correcto.

El éxito suele ser una puta ingrata. En 2007 Radiohead editaba un fantástico In rainbows y medio mundo volvía a rendirse frente a los ingleses. Se consagraban además como una de las bandas más creativas e influyentes de las últimas dos décadas (si es que no la más). Sin embargo, bastó una caída para que muchos todos dudase(mos) de sus capacidades. Aquella llegó en 2011, año en que la banda editó el confuso The king of limbs, ¡que no es un mal disco! pero si uno en donde costó percibir a la banda y más bien pareció ser un capricho musical de Thom Yorke. De hecho, no tuvimos gira promocional del trabajo y a poco andar cada integrante acabó concentrándose en sus respectivos proyectos personales, poniendo a Radiohead en el congelador por un largo tiempo, cinco años de hecho.  

La edición de A moon shaped pool aparecía entonces, en la previa, como un hito importante en la carrera de la banda. Y es que no la tenían nada de fácil. Cuesta en la historia de la música contemporánea encontrar otra banda con una discografía a cuestas tan potente como la que ostenta Radiohead, que me perdonen la comparación pero solamente el ejemplo de The Beatles se me hace en ese sentido similar. Por ende, y sobretodo considerando los antecedentes previos, las dudas se respiraban en el aire: ¿Serían capaces a estas alturas de editar un disco que volviese a re ubicarlos a la vanguardia del resto o al menos cumplir con el estar al nivel de su inmensa discografía? 

La respuesta vive entre nosotros desde hace unas semanas, once canciones que en poco más de cincuenta minutos llegan para contestar cualquier tipo de incertidumbre y lo más increíble es que los de Thom Yorke vuelven a hacerlo siendo fieles a sus formas, es decir, sin entregar concesiones. A moon shaped pool es entonces, ni más ni menos, la hermosa demostración de vida de Radiohead

Pero pasemos a la música, que es lo único realmente importante acá. El álbum abre con 'Burn the witch', probablemente la canción más insólita de este, la única que desencaja un tanto con los ambientes melancólicos que abundan en el disco. En 'Burn the witch' de inmediato percibimos la presencia de la banda en materia de arreglos (gloriosos los vientos que adornan el tema), además de una estructura 'single' bastante tradicional que perfectamente podría haber encajado dentro de un álbum como Hail to the thief (2003). La partida es sólida, por lo que cuando comienza a sonar el melancólico piano de Thom Yorke, protagonista en 'Daydreaming', resulta inevitable el creer que el asunto desencajará. Sin embargo, la dolorosa balada convence y conmueve, no tendrá la intensidad de un 'You and whose army' , 'Fake plastic trees' o 'Piramid song', pero en lo suyo 'Daydreaming' absorbe con armas propias. 

El primer momentazo del álbum llega con 'Decks dark', una canción que jamás sube y que se mueve todo el tiempo sobre tiempos y ambientes muy calmos pero que, sin embargo, gracias al exquisito complemento instrumental que la banda regala acaba maravillando (escucharla con unos buenos audífonos es un placer al oído). Otras que en materia de arreglos no se quedan aunque funcionan en lineas más intensas son 'Ful stop' e 'Identikit', la primera es pura dinámica creciente (inevitable la asociación con la ya clásica 'Idioteque') mientras que la segunda debe ser la única del álbum en donde la guitarra de Johnny Greenwood adopta protagonismo. Entre estas dos y a manera de puente sonaran 'Desert island disk' y 'Glass eyes', preciosas baladas que danzan con calma sobre guitarras acústicas y pianos. 

A estas alturas del partido, entrando en la recta final del álbum sobra comentar que este ya ha convencido y no tan solo eso, sino que lo ha hecho sin ripios ni puntos medianamente bajos. Estas positivas sensaciones se confirman con toda la pasada final, acá 'The numbers' conmueve con sus soberbios arreglos orquestales, 'Present tense' recuerda en un inicio los tonos acústicos de 'Faust arp' (una del In rainbows) pero luego con la banda en pleno entrando al tema todo acaba de encajar, 'Tinker Tailor soldier sailor rich man poor man beggar man thief' es absoluta tranquilidad (nuevamente el trabajo de orquesta es notable) mientras que el cierre llegará con una nueva versión de 'True love wait', una canción muy antigua de Radiohead, que incluso fue editada en un vivo de 2001 pero que acá es recuperada con arreglos de piano + una sentida interpretación de Yorke, quien sabemos acaba de terminar una relación de años, lo cual evidentemente ha influenciado el doloroso tono que en general predomina en el álbum.   

Por sobre cualquier concepto me parece que A moon shaped pool, el noveno disco de estudio de Radiohead, es un trabajo hermoso. Probablemente en el canción a canción cueste encontrar alguna que destaque particularmente sobre el resto pero, sin embargo, en el global el álbum es fabuloso, arreglado de manera impecable por una banda que vuelve a demostrar su categoría dentro de la escena actual. Como para que no queden dudas al respecto. 

8,5/10
¡Excelente!


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3 comentarios:

  1. No enganché mucho a las dos primeras escuchadas más allá de los dos singles que habían sacado. Pero ahora que lo he escuchado como 10 veces (jaja) lo he disfrutado bastante (más que el TKOTL por lo menos).

    No encontré puntos negativos en tu reseña, a lo que voy yo, es cuál serían las razones para no darle las 5 estrellas.

    He estado escuchando el Arktis y me ha gustado caleta. Te recomiendo un par de discos que me han gustado de lo que va el año:
    Colorin Books de Chance the Rapper, Lemonade de Beyoncé y Sings Favourites de Mark Kozelek.

    Saludos!

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    1. Gracias Master, la reseña de Beyonce viene en camino por cierto, anda deambulando por ahí en mi cerebro.

      Respecto a las 5 estrellas, mi criterio ahí es el de la obra maestra, no solo un gran o incluso grandioso disco. Ok Computer es una obra maestra, Kid A es una obra maestra (o quizás un 4.5, a gusto de consumidor lo dejo). In Rainbows es un 4.5 ya que aborda sonidos tradicionales dentro de lo que fue el pasado de Radiohead y este disco creo que no da para 4.5, se queda en el 4. Es un disco exquisito pero me parece que no desprende esa sensación constante de estar oyendo algo extraordinario, le faltan temas más explosivos, una intensidad que alcance puntos más altos, no se, es difícil de explicar ya que todo esto es tan subjetivo.

      Saludos! Se agradece como siempre el aporte.
      Esteban

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  2. Leo tu blog de vez en cuando. Últimamente lo tomo como referente para el mio. Es un álbum magnifico el de Radiohead, hipnotiza de principio a fin. Casi que hasta se puede omitir el hecho de que la gran mayoría de canciones fueran descartes de trabajos anteriores.

    Saludos, y sigue así.

    Creo que deberías escuchar este disco. Uno de los debuts más arrolladores en lo que vamos del año. http://thisismusiccolombia.blogspot.com/2016/05/resena-yak-alas-salvation.html

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