lunes, 27 de noviembre de 2017

The National : Sleep Well Beast (2017)

"No deslumbran pero confirman nivel..."

Con siete álbumes bajo el brazo y un importante prestigio a cuestas, The national poco a poco se se ha ido instalando como una propuesta segura. Los tipos disco a disco fueron mostrando un sostenido crecimiento, encontrando su sitio en medio de ese sonido que danza elegantemente sobre la calma y que se encuentra fuertemente marcado por el característico registro vocal de Matt Berninger. En ese sentido, el peak pareció llegar en la notable pasada por High violet (2010)Trouble will find me (2013), al punto de que cuatro años más tarde han reiterado la fórmula, con ciertos matices eso si. Esta vez, dicho en simple, nos han regalado un álbum marcado por percusiones que juguetean durante gran parte del disco con cambios de velocidad y elementos electrónicos, los cuales se suman al estilo característico de la banda y por tanto colaboran en el encuentro de una dinámica bastante atractiva para el álbum. 

Ahora, de todas maneras el fuerte de The national en Sleep well beast vuelve a estar en el puñado de melodías notables que encuentran, algunas de ellas tristes y profundas, marcadas por un piano marca de la casa, como es el caso de 'Nobody else will be there', 'Born to beg' o 'Carin at the liquor store', otras que coquetean con la ya mencionada electrónica, ahí 'Walk it back', 'I'll still destroy you', 'Guilty party' o 'Sleep well beast' (la canción) destacan, mientras que existen pasadas en donde las guitarras aparecen y entregan interesantes matices al sonido del disco, como es el caso de 'Day I die' o 'Turtleneck'. Mención aparte por cierto merece 'The system only dreams in total darkness', probablemente el mejor tema del álbum, con un coro exquisito que quedará enmarcado dentro de los mejores que oiremos en este 2017.

The national lo ha vuelto a hacer, no deslumbran pero se las arreglan para entregar un álbum sólido, inteligente, a ratos muy sensible y a ratos dinámico. Como para seguir atentos a sus pasos...

7/10
Muy bueno.


Otras reseñas de The Nacional:
2013 // Trouble will find me 

sábado, 18 de noviembre de 2017

Myrkur: Mareridt (2017)

"Amplia el interés..."

En 2015 Amalie Brunn, vocalista danesa proveniente del mundo del pop, debutaba en el metal con un álbum muy comentado en su momento, criticado e incluso repudiado por muchos. En lo personal, M me pareció un trabajo que pese a sus fallos (la falta de cohesión, por ejemplo), logró entregar un puñado de canciones diversas que cumplían con el objetivo de sembrar un interés respecto al futuro de la vocalista. Y en ese sentido, lo que esta viene a entregarnos dos años más tarde no hace sino ratificar que hicimos bien en mantenernos alertas. Mareridt es un disco más compacto que el debut, que evidencia una linea más coherente en su global y que vuelve a dejar instaladas gratas sensaciones respecto a lo que podría venir de ahora en adelante.

Lo primero que quisiese comentar respecto al álbum es que quienes consideran que Brunn no pertenece por naturaleza al mundo del metal deberían sentirse satisfechos con este, ya que salvo contados momentos donde el disco coquetea con elementos cercanos al black metal (canciones como 'Maneblot' o momentos de la fantástica 'Ulvinde'), gran parte del trabajo dispara hacia otras latitudes, todas muy oscuras por cierto, pero desde perspectivas que distan absolutamente de la música extrema. Nos encontramos así con pasadas que sacan partido al dulce registro de la danesa, como es el caso de 'Mareridt' (la canción), 'De tre piker' o 'Crown', pasajes que encaran un rock más denso, con riffs espesos y repetitivos que regalan murallones de guitarras bastante interesantes, ahí destacan 'The serpent', 'Elleskudt' y 'Funeral' , o piezas instrumentales que abordan sonidos más folclóricos plagados de violines y percusiones, como ocurre en 'Kaetteren'.

Puede que Mareridt marque el distanciamiento definitivo de Myrkur con la música extrema (ojo a los temas extras que la versión limitada regala, que quizás están entregando señales pensando en el futuro), sin embargo, este aspecto honestamente me parece irrelevante en su caso. Más allá del morbo que genera esta situación (una mujer modelo aullando registros cercanos al black), lo interesante respecto al proyecto sigue siendo la diversidad musical que propone, la cual en este caso vuelve a salir bien parada y mientras lo musical sea el centro, creo todo lo demás seguirá pasando a segundo plano.

7/10
Muy bueno.


Otras reseñas de Myrkur:

lunes, 13 de noviembre de 2017

Cannibal Corpse: Red Before Black (2017)

"Monótono y agotador..."

Desde hace un tiempo a la fecha que Cannibal Corpse optó por el estancamiento. Fieles a un death de características muy marcadas y reconocibles, los norteamericanos decidieron renunciar al factor sorpresa y limitar su trabajo a desarrollar de manera adecuada lo que mejor saben hacer. En esa línea, durante la última década han deambulado entre álbumes que han cumplido con lo suyo (Evisceration plague, 2009) y otros que han logrado sacar brillo a la fórmula (Torture, 2012). Ahora, con Red before black el asunto ha vuelto a ir por donde esperábamos pero con una salvedad: me parece que desde la edición de Kill (2006) ninguno de sus trabajos había resultado tan monótono y agotador como este. Dicho en simple: Red before black no es un mal álbum, pero aburre. 

El disco abre con todo. La pasada por 'Only one will die' + 'Red before black' (la canción) es demoledora y no entrega respiro. Posteriormente vendrán las clásicas pausas (que esto ya viene con manual incluido) en 'Code of the slashers' (que cuenta con un grato subidón hacia el cierre) y 'Shedding my human skin', para luego retomar la velocidad con 'Remained'. Y así, aceleraciones, pausas, un George Corpsegrinder Fisher que en lo suyo permanece soberbio, las guitarras afiladas están, el doble pedal incesante... pero todo muy predecible y en piloto automático. La verdad es que pasando el nudo del álbum no hay nada que en lo personal me haya llamado a seguir ahí, de hecho me entré a cuestionar: ¿Cuál es el sentido para Cannibal Corpse de seguir cumpliendo religiosamente con 12 temas disco tras disco si al quinto o sexto ya está todo dicho? 

El álbum más monótono de Cannibal en una década. 


5/10
Nada muy especial...


Otras reseñas de Cannibal Corpse:
2014 // A skeletal domain
2012 // Torture 

sábado, 11 de noviembre de 2017

Exhumed : Death Revenge (2017)

"Diverso, técnico y atractivo..."

En 1828, la legislación escocesa flexibilizó la aplicación de la pena de muerte, lo cual generó una escasez de cuerpos para la experimentación médica. En ese contexto, William Burke y William Hare, tras la muerte natural de un inquilino en el hostal de una de sus esposas, decidieron vender dicho cuerpo a un profesor universitario, lo cual acabó derivando en una serie de asesinatos (en total 16) y posterior tráfico de cuerpos. Toda esta macabra historia es la que los californianos de Exhumed abordan en su nuevo y notable álbum, un trabajo que trae al presente una tenebrosa historia musicalizada con enorme talento.

La portada, con todo ese tono de terror ochentero, de inmediato nos llama a ir por el disco. ¿Y con qué nos encontramos en el? Con una exquisita dosis de lo mejor que Exhumed sabe hacer, esa espectacular mezcla entre death + grindcore, ese sonido que equilibra un metal técnico con arreglos violentos y desenfrenados, todo esto edulcorado además por una serie de instrumentales dignos de una buena película de horror y que en el contexto del disco funcionan a la perfección. 

El álbum abre de hecho con una pieza muy sutil que introduce el trabajo entre vientos y un piano para luego dar paso a una seguidilla de temas absolutamente desbocados, con guturales muy oscuros que se intercalan con voces chillonas ('Defenders of the grave', 'Lifeless' o 'Night work', tremendos ejemplos), estructuras directas que son puro desenfreno ('Unspeakeble' o 'A funeral party'), otras que apuntan a un death más clásico ('Dead end', con gargajo a medio tema incluido, uno de los momentazos del álbum), pasadas más melódicas ('Incarnadined hands') y momentos definitivamente diferentes, como el interludio 'Grave-makers of Edinburgh' o el instrumental 'The anatomy act of 1832', siete minutos donde la única reacción posible es el aplauso.  

En definitiva, Exhumed nos entrega un álbum con concepto digno de destacar y que desde ya se enmarca dentro de lo más notable que oiremos en este 2017, un trabajo que en materia técnica no deja títere con cabeza y que en lo musical se muestra tan diverso como atractivo. 

8/10
Excelente.

viernes, 3 de noviembre de 2017

Bunbury : Expectativas (2017)

"Coherente y equilibrado..."

Pese a que su último álbum de estudio data de cuatro años atrás, quienes seguimos a Bunbury no podríamos decir que no hemos sabido de él durante este período. Tuvimos un álbum en vivo grabado en Madrid, un más que interesante MTV Unplugged y un compilado doble con rarezas varias. Tocaba ya, sin embargo, ir por algo realmente nuevo, sobretodo considerando que la pasada por Licenciado Cantinas (2011) y Palosanto (2013), pese a ser proyectos que daban rienda suelta al Bunbury inquieto, ese que se sumerge de lleno en cada uno de sus productos y participa en todo detalle, no convenció del todo. La edición, por tanto, de Expectativas contaba con cierta presión encima, la de re alinear un tanto la carrera del español, que independiente de su innegable (e inagotable) talento, desde siempre ha mostrado un dejo de irregularidad en su andar...

Estas intenciones, las de entregar un conjunto de temas coherentes entre si, se aprecian en Expectativas, un álbum que efectivamente suena compacto, tanto en temáticas a tratar como en sonido. Hablando de las letras habría que mencionar el que esta vez Bunbury ha escapado del personalismo, ha dejado un tanto de hablar de si mismo para abordar un enfoque más social, disparando dardos a la política ("Nada ocurre por casualidad. No puede un retrasado mental estar al mando de todo..." afirma en 'En bandeja de plata') e incluso a colegas artistas ("No es cuestión de credibilidad, no tampoco de autenticidad. Es el resultado final el que me parece insuficiente..." recita en 'La actitud correcta'). 

Ahora, en lo musical lo tenemos nuevamente en plan full band, aunque debido a la diversidad de arreglos que acá se entregan, el asunto no alcanza jamás a cansar. El disco además desprende una espontaneidad importante, percibes a la banda tocando junta y aquello se disfruta muchísimo. En cuanto a canciones, Expectativas es parejo (quizás demasiado), un disco donde cuesta encontrar temas que destaquen muy por sobre otros y ahí quizás habría que encontrar un "pero". En lo personal he disfrutado con los sintetizadores de 'La ceremonia de la confusión' , el rock de 'Cuna de Caín' y todo lo que suena a partir de 'Parecemos tontos', con momentos altos vividos en la intensa 'Al filo de un cuchillo', la cambiante 'Bartleby - Mis dominios' o la exquisitamente oscura 'Supongo'. Todo está muy bien, pero no encuentro en el álbum dos o tres joyas que exploten a un nivel mayor, lo cual siento deja un gusto extraño al pasar y pasar por el álbum...

Como sea, Enrique Bunbury regresa con uno de los buenos álbumes que nos dejará su carrera, un disco centrado en las canciones y que suena equilibrado, lo cual ha acabado por configurar con conjunto que resulta fácil de seguir y disfrutar. Se extrañan algunas canciones particularmente potentes o algo más de riesgo, pero insisto, en el tema a tema el asunto no debería dejar a nadie disconforme.


7,5 / 10
¡Muy bueno!


Otras reseñas de Enrique Bunbury: