martes, 14 de febrero de 2017

30 Años De... Judas Priest : Turbo (1986)

Tres décadas atrás varias leyendas del heavy metal vivían sus mejores momentos, comercialmente hablando. Eran otros tiempos, cosas como 'Final countdown' o 'Jump' estaban sonando, Iron Maiden se metía en la onda con Somewhere in time e incluso Ozzy intentaba subirse al carro, por lo que Judas Priest no tardaría en entregar su propuesta glam/metal/pop

Los británicos venían de dos álbumes fenomenales que esculpieron de cierta forma el heavy de aquellos años, me refiero a los imprescindibles Screaming for vengeance (1982) y Defenders of the faith (1984) pero en 1986 los tiros iban por otros lados, había que suavizar un poco las formas para ver que pasaba ahí. El resultado, que en un inicio se pensó como un álbum doble (uno suave y uno más agresivo), acabó tomando forma en las nueve canciones que componen Turbo, el disco más comercial en la carrera de Judas Priest.

El manual de un disco comercial afirma que el primer single debe abrir, y así hizo la banda, dejando para más adelante la apertura natural que era 'Out in the cold' (que de hecho fue usada durante la gira como opener para cada show) y dando la partida con 'Turbo lover', que fuera de contar con una estructura muy contagiosa (el tiempo les daría la razón con ella ya que rapidamente se transformó en un clásico) cargaba con la particularidad de incluir un nuevo juguete: unas guitarras que sonaban como sintetizadores. El resto del disco deambulará entre dos veredas, una cargada al speed metal donde 'Locked in' y 'Rock you around the world' se lucen con buenas armas, fuera de mostrar a un Rob Halford en plena madurez vocal, con un manejo de los agudos que ya eran marca de la casa, y una serie de irregulares medios tiempos, donde destaca 'Hot for love' mientras que otras como 'Private property' o 'Parental guidance' más allá del coro contagioso no logran llegar. 

En la comparación con sus antecesores inmediatos y posteriores sucesores (recordemos que al disco le seguiría la implacable dupla Ram it down + Painkiller) un disco como Turbo queda inevitablemente mal parado. A tres décadas de su lanzamiento constatamos que el experimento solo nos dejó dos o tres canciones divertidas, sin embargo, situado en su contexto histórico el álbum brilla con alas propias (es Judas priest , no una imitación de alguna otra banda). A 31 años de su lanzamiento lo valoramos con cariño y respeto, el que se le debe guardar a una leyenda de la magnitud de los enormes Judas Priest

6/10
Bueno, cumple.


Otras reseñas de Judas Priest:
2014 // Redeemer of soul

1 comentario:

  1. Que sea comercial no significa que sea malo, en perspectiva del paso del tiempo me parece un buen disco, Judas siempre tuvo y tendrá canciones de gancho incluso las más metaleras tienen coros hiper recoradables. Que en pleno auge del rock popero hayan entregado su propuesta a ese estilo, creo, los valora aun más como una banda que siempre marcó tendencia.

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